Generosidad
¿Te ha pasado que un día cualquiera alguien te da un regalo que no esperabas? ¿O tal vez te sonríen en la calle, o te saludan calurosamente? Los humanos fuimos diseñados para dar y recibir afecto, para vivir en comunidad. Cada vez que nos relacionamos de buena forma con otra persona, estamos alterando positivamente nuestras emociones y sentimientos.
Es inevitable pensar en lo emocionante que es dar y recibir regalos en Navidad. ¿A quién no le gusta? Hasta el suéter que te regala tu tía, lo recibes con agrado.
La Biblia dice en Proverbios 11, que cada buena acción que realizamos es una semilla. Una semilla que se transforma en vida. ¡Qué palabra tan agradable! Ningún árbol crece en minutos. ¡Tardan años! De igual manera, nuestras buenas acciones con los demás deben cultivarse para así provocar vida. ¿Tienes alguna relación difícil con alguien? Prueba esta vez con una buena acción, algo que él o ella no se esperan. Verás cómo esa pequeña semilla dará frutos.
Esta Navidad, piensa en los demás antes que en ti y verás cómo pasas la mejor Navidad de todas hasta ahora.
'El premio de los buenos es la vida misma, y el premio de los sabios es el aprecio de la gente. ' Proverbios 11:30 (La Biblia - TLA)
'Quienes son generosos, reciben en abundancia; quienes ni sus deudas pagan, acaban en la miseria. ' Proverbios 11:24 (La Biblia - TLA)
'Lo mismo pasa con la fidelidad a Dios: de nada nos sirve decir que le somos fieles, si no hacemos nada que lo demuestre. Esa clase de fidelidad está muerta. ' Santiago 2:17 (La Biblia - TLA)